lunes, 31 de enero de 2011

ESAS BOLSAS DE PLÁSTICO...


LOS DATOS. Elaboración propia a partir de varios artículos de prensa.

Las bolsas de plástico dañan el medio ambiente ya que tardan entre 100 y 150 años en degradarse. Un 65% de ellas suelen ser reutilizadas como bolsas de basura y acaba su ciclo en los vertederos. Tan sólo el 10% de ellas acaba en los contenedores amarillos para su reciclaje. Un porcentaje elevado acaba en la naturaleza, en algunos casos formando islas lineales de decenas de kilómetros en medio de los océanos, junto con otros residuos flotantes. Estas islas se forman en las zonas de convergencia de masas de agua y sobre ellas que viajan especies invasoras. Algunas especies marinas confunden las bolsas con alimentos y mueren al ingerir esos plásticos.

En España se emplean 16.500 millones de bolsas de plástico de un solo uso al año, 365 por ciudadano.

España es el primer productor de la Unión Europea de bolsas de un solo uso (700 empresas y 11.000 trabajadores) y el tercero en consumo.

De las diferentes alternativas a las bolsas de plástico de un solo uso, las mejores opciones para transportar la compra son las bolsas de tela y el “carrito de la compra”. Opciones intermedias son las bolsas de plástico de más de un uso, las bolsas de rafia y las bolsas biodegradables.

Las bolsas biodegradables, en principio, no son dañinas para el planeta ya que su composición proviene de fuentes renovables, como el almidón o la celulosa (patata, caña de azúcar, maíz), se degradan fácilmente y se pueden compostar del mismo modo que la basura orgánica. Por el contrario son más caras y conllevan problemas de abastecimiento y de encarecimiento de los alimentos, ya que están hechas de patata o maíz, además del consumo de agua para su cultivo.
Las bolsas fotodegradables, se descomponen al contacto con el sol, sin por ello degradarse del todo.
También hay bolsas elaboradas con oxodegradables, unos aditivos que rompen las moléculas de plástico haciendo que las bolsas desaparezcan del campo visual, pero que no facilitan la bioasimilación.

MI OPINIÓN

Resulta lógico que se plantee la erradicación de un producto que, a fin de cuentas, tampoco es imprescindible. De todas formas, desde hace años, se podría haber incidido educando a la sociedad (no solo al consumidor) para un uso correcto de las bolsas y no sería “necesaria” su supresión.

Alternativas posibles para un consumo menor de esas bolsas pasaba por que fuesen de una calidad un poco mejor. En algunos supermercados ofrecían y ofrecen bolsas de pésima calidad que te obligan a cargarlas con poco peso y por tanto a llevar más bolsas e, incluso, coger alguna bolsa adicional por si se rompe la que te han dado.
Las bolsas de “un solo uso”, en realidad, no son de un solo uso. Yo, y otras muchas personas, las usamos para transportar, proteger o guardar diferentes cosas, además de usarlas precisamente para reciclar, depositando en ellas los envases plásticos que luego van a parar al contenedor amarillo de los plásticos, también para transportar los envases de vidrio, el papel y los residuos orgánicos. Los recicladores de estos materiales pueden separar las bolsas que aparecen en sus contenedores.
Si se utilizan para depositar basura acaban en el vertedero junto con el resto de los desechos, un tratamiento correcto en estos lugares debería impedir que salgan volando de allí y vayan a parar a la naturaleza.

Lo que más me ha molestado son las hipócritas “campañas de concienciación” de los supermercados. Nos han intentado vender la retirada de las bolsas gratuitas desde el punto de vista ecológico y de la últimamente tan nombrada sostenibilidad. Si de verdad la motivación fuese ecológica deberían cambiar otras muchas cosas para que su actividad sea más sostenible (palabra de moda, que muchas veces se usa sin analizar de verdad que es lo que se está diciendo) y la motivación de la retirada de las bolsas de un solo uso sea creíble.

Algunas cosas que podrían hacer las grandes cadenas de supermercados o hipermercados para demostrar su “conciencia ecológica” podrían ser las siguientes:
·     Fomentar los proveedores locales. Varias de esas grandes empresas nos ofrecen una gran cantidad de productos alimenticios de procedencia alemana, francesa o de cualquier otro país, cuando se trata de artículos de los que perfectamente se podrían proveer desde España por haber una amplia industria elaboradora. Con ello se evitaría una gran parte de la contaminación producida durante el transporte.
·     Como decía, España es el principal productor de bolsas de plástico de un solo uso, pero las bolsas de rafia que han dado (y ahora venden) muchos comercios son importadas, con lo que de nuevo hay una gran contaminación originada por el transporte de esas bolsas.
·     Podrían suprimir los dobles envases. No es necesario que la leche, el agua u otros productos se vendan agrupados en varias unidades con la necesidad que eso supone de un envoltorio adicional para unirlas, perfectamente se pueden comprar por unidades sueltas. No es necesario que las latas de conserva tengan un envase de cartón adicional, etc.
·     Muchos productos llevan un envase mucho más grande del necesario para el contenido que tienen, es solo una cuestión de imagen. Esto supone más "gasto ecológico "durante la fabricación y el transporte y mayor generación de residuos.
·     Podrían evitar el buzoneo masivo de publicidad. Si un comercio tiene una buena relación calidad precio el mensaje de difunde fácilmente con el sistema boca oído. No hace falta consumir papel, tinta y transporte de esa publicidad.
·     La sección de congelados debería disponer de cámaras con tapa para evitar la perdida de frío, pero claro, seguro que los estudios dicen que se consume más si se accede fácilmente.
·     Deberían fomentar la venta de productos de calidad, que duren muchos años y no se tengan que sustituir al poco tiempo, evitando toda la parte negativa de general residuos, tener que fabricar un nuevo producto y transportarlo de nuevo hasta el consumidor.

Podríamos continuar con las cosas que se pueden cambiar para ser  más ecológicos, pero vivimos solo de vender imagen, lo importante es la apariencia, seguir la moda… la hipocresía.

viernes, 28 de enero de 2011

CADA VEZ MÁS VIEJOS



Artículo basado en los Datos de la Estadística de Movimiento de Población del Instituto Nacional de Estadística (INE), extraídos y editados a partir de la información publicada en diversos medios de comunicación el día 27 de enero de 2011.
 
Final del formulario
El descenso de la natalidad registrado por primera vez en 2009, tras una década de aumento constante, continúa la misma tendencia en el primer semestre del 2010, cuando se registraron un 3,2 por ciento menos de nacimientos que en el mismo periodo del año anterior.

Menos niños y cada vez más tarde: la edad de maternidad ha alcanzado el máximo histórico de 31,12 años, una tasa que llega hasta casi los 32 años en las madres de nacionalidad española. El indicador coyuntural de fecundidad (número medio de hijos por mujer) disminuyó a 1,38 hijos por mujer en el primer semestre de 2010, desde 1,39 en 2009 y 1,46 de 2008.

Según el INE, la menor fecundidad se observa tanto entre las mujeres de nacionalidad española (1,32), como entre las extranjeras (1,65), que además suponen el 20,1 % de las nuevas madres. Si bien estas últimas tienen sus hijos en edades más tempranas que las españolas (28,5 años de media frente a 31,8), los datos reflejan cómo en solo siete años la media de edad a la que deciden tener a su primer hijo se ha retrasado más de un año.

En 1976, cada mujer tenía una media de 2,80 hijos y ahora tiene 1,38. Estamos lejos del 2,1 del umbral necesario para que se asegure un recambio generacional.

La pirámide de población invierte cada vez más sus escalones en nuestro país. Mientras desciende de forma alarmante la natalidad, la esperanza de vida crece llegando a los 78,66 años para los hombres y los 84,65 de las mujeres.

Si cruzamos los datos de nacimientos con los de fallecidos en España, se observa cómo los porcentajes se acercan peligrosamente. Así, la tasa bruta de natalidad en 2009 fue de 10 niños por cada mil habitantes, mientras que la cifra de defunciones supera los 8 por cada mil.

Los motivos de este descenso constante en la tasa de fecundidad, desde mi punto de vista, son diversos:

* Tendencia a intentar disfrutar cada vez más de nuestra vida y nuestra libertad, lo que lleva a quien quiere ser madre apurar al máximo para poder salir de marcha, viajar, hacer actividades diversas, etc.

* La inestabilidad laboral hace que las parejas retrasen su primer hijo a la espera de encontrar un trabajo estable o una cierta seguridad en el trabajo conseguido.

La falta de conciliación en las empresas, con jornadas partidas que llevan a estar todo el día fuera de casa, más aún cuando el trabajo lo tenemos a muchos kilómetros de nuestro domicilio.

* Un futuro incierto y con perspectivas poco positivas, que lleva a muchas personas a plantearse si merece la pena traer a una nueva persona a este mundo.

* Las perspectivas de no poder educar directamente a los hijos por la imposibilidad de estar con ellos y tenerlos que dejar en manos de cuidadores particulares, guarderías o familia.

* Los sueldos bajos impiden o dificultan tener más de un hijo si le queremos dar una cierta calidad de vida o incluso si queremos poder pagarle las necesidades mínimas (y menos mal que muchas parejas pueden contar con sus padres para cuidar de los nietos, dándose el caso de los abuelos esclavos).

España envejece sin que la entrada de inmigrantes sea capaz de detener el proceso. Las extranjeras residentes en nuestro país se han ido asimilando a las españolas y cada vez tienen menos hijos.

¿Es mala esta situación?. Pues no tengo ni idea, la sociedad evoluciona (que no necesariamente quiere decir que mejora) y se adapta a las nuevas circunstancias de forma paulatina.

El futuro lo hacemos nosotros con nuestras acciones del presente.

jueves, 27 de enero de 2011

PRESENTACIÓN DEL BLOG

Hoy, 27 de enero de 2011 nace un nuevo blog, totalmente desligado del blog que mantengo desde hace unos años. Los lectores que debería tener este blog son completamente diferentes a los de aquél aunque, a buen seguro, algunos lectores serán compartidos. Aquél es para compartir actividades éste para compartir pensamientos.
Este blog contendrá aquellas sensaciones, noticias o vivencias del día a día que me apetecen compartir u opinar sobre ellas. Desde hace tiempo he ido dejando muchas cosas en el tintero virtual ya que se apartaban de la filosofía de mi blog actual (que seguirá funcionando independientemente de este) y de lo que esperaban encontrar mis lectores habituales.
Como siempre, tendré lectores que llegarán aquí por casualidad a través de buscadores y lectores fieles, unos para interesarse por lo que hago o pienso y otros simplemente para ver que pueden criticar. Me gustaría que mis artículos sean complementados, matizados, rectificados o ampliados con los comentarios de las personas que los leen. Los comentarios tendrán una aparición inmediata en la página, sin previa moderación, espero que quien haga comentarios los haga desde el respeto, la coherencia  y la argumentación. Me gustaría que los comentaristas firmen sus aportaciones con su nombre real. Ha costado muchos años, muchos sacrificios e incluso muchas muertes, conseguir la libertad de expresión como para que no pongamos nuestro granito de arena en agradecimiento a todos aquellos que han luchado y luchan por ella.
Aquí encontrarás un batiburrillo de temas, unos tratados en profundidad y otros simples comentarios, unos originales (la mayoría) y algunos copiados en parte de otras páginas (en estos casos habrá una nota o un enlace a la fuente de información. Explicaré cosas que me pasan o sensaciones que tengo y crea que pueden ser útiles para alguien, habrá filosofía, ideas, pensamientos...  En cierta forma, una parte del contenido serán aquellas cosas que comentamos en el trabajo, en el bar, que escribimos en el Facebook...
Todo lo que escriba, evidentemente, es a título personal excepto si se indica lo contrario y, posiblemente, no tenga un interés especial para la mayoría de las personas, por eso, si has entrado en la página y no te interesa el contenido más que criticarlo por criticarlo no vuelvas a entrar. Esta página es una simple roca que sobresale esporádicamente de las olas del inmenso océano, no es necesaria su lectura.
Algún día escribiré varias cosas, otros ninguna, ni vivo de esto ni me quiero crear ninguna obligación. Unas personas escriben un diario, otras poesía, otras novelas, otras colaboran en revistas más o menos difundidas, otras personas solo leen y otras muchas ni leen ni escriben. Yo hace años que escribo y simplemente disfruto con ello.
Desde el punto de vista de la escritura procuraré hacerlo de la manera más correcta que sea capaz, sin cometer faltas o usar palabras o expresiones incorrectas, pero es muy posible que por las prisas o por desconocimiento me equivoque más de una vez.
Desde el punto de vista literario también intentaré expresarme de la manera más rica, eficiente y correcta pero, posiblemente, tampoco conseguiré un grado elevado de calidad literaria, te pido disculpas por ello.
Teniendo en cuenta la inmediatez de muchos artículos, algunos necesitarán segundas o terceras partes para hacer un seguimiento correcto al tema, matizar algún detalle o ampliar el contenido. En todos estos casos las adiciones o modificaciones estarán diferenciadas mediante la fecha, el color del texto u otro elemento que actuará de indicador.
Espero que todos mis lectores disfruten de los artículos porque, como he comentado antes, la persona que vea que este blog no es de su interés no tiene la obligación de repetir, ni es lógico que repita.
Yo, ya empiezo a disfrutar de esta nueva vía de expresión.